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Voces olvidadas: Reflexionar sobre las religiones desde la perspectiva infantil

 David Emiliano Pérez Rangel

¿Qué papel juegan lxs niñxs en los estudios de religión? ¿Qué tanto hoy se investiga y se conoce sobre sus expresiones religiosas? ¿Cuál es la relevancia en las ciencias sociales de comprender los diversos fenómenos religiosos desde la perspectiva y reflexión de las niñeces?

Las religiones (junto a sus fenómenos y expresiones) siempre han estado presentes en diversas culturas, sociedades, y grupos sociales. Por ello, estas cuestiones han sido y son objeto de interés de diversas ramas del conocimiento que buscan comprender sus distintas manifestaciones. Sin embargo, “los científicos sociales no son ajenos al pensamiento dominante de su época, que es un pensamiento adultista”. [1]

Leena Alanen (1994) menciona que la agencia de las infancias, generalmente, es excluida por los sistemas sociales. Así pues, las diferencias entre adultxs y niñxs reside en las posiciones sociales y de poder que son configuradas por distinciones biológicas y físicas. Por tanto, “las relaciones sociales entre niños y adultos operan en un sistema generacional establecido, profundo y duradero como lo es el sistema de género. En esta estructura relacional, la clase dominante corresponde a la posición del adulto y la subordinada a la posición del niño [y la niña]”. [2]

De igual modo, Pavez y Sepúlveda (2019) sostienen que la comprensión y construcción de las realidades sociales no sólo dependen de lxs adultxs, sino también de lxs niñxs, ya que estos también “son agentes y su acción siempre está presente. [Más bien], son las estructuras sociales las que impiden visibilizar este fenómeno”. [3]

Por su parte, Rodríguez (2009) agrega que las ciencias sociales siempre se han caracterizado por su enfoque adultocéntrico, donde las infancias quedan invisibilizadas dentro de las estructuras sociales. Las infancias son consideradas como seres pre-sociales; ya que su única función es instrumental para “la reproducción del orden social”. Por ello, el autor busca una aproximación hermenéutica en la reconstrucción social de las niñeces, para evitar un reduccionismo “en la interpretación de la red de fenómenos que afectan a las vidas de [las y] los niños”. [4]

No obstante, ¿cómo se relaciona todo esto con los estudios en temas de religión y niñeces? E. Linder bien menciona que “las religiones siempre están a un paso de extinguirse”[5]. Por ello, agrega García Palacios et. al. (2018), las niñeces ocupan un lugar privilegiado; pues, es común que diversas comunidades, grupos y/o instituciones religiosas busquen métodos y formas de transmitir a lxs niñxs sus valores, creencias, rituales, prácticas, entre otros aprendizajes más.[6]

Así pues, el vínculo entre las esferas de religión y niñeces claramente causa interés e inquietud para comprender diversos fenómenos y problemáticas sociales. No obstante, cabe cuestionar la perspectiva de las investigaciones que aborden esta intersección. Es decir, analizar la postura con la que dichos trabajos de investigación fueron escritos; si fue con una mirada adultocéntrica (que minimice y/o generalice la agencia de las niñeces), o con una perspectiva que visibilice y rescate las percepciones de las niñas y niños sobre su religiosidad e identidad religiosa. Esto es sumamente importante porque “en la mayoría de los estudios…sobre religión, las experiencias de los niños y las niñas y los procesos educativos que los involucran han ocupado un espacio marginal”.[7]

Por ello, es fundamental retomar las reflexiones de las niñeces sobre la religión para observar y comprender fenómenos que, tal vez, no se han considerado y/o analizado en las ciencias sociales. La participación de las infancias en estos temas también contribuiría con otras perspectivas e ideas en análisis científicos sociales de religión como: ecoteología, feminismos, conversiones religiosas, diversidad sexogenérica, entre muchos otros temas más de suma relevancia.  Hay que reconocer que lxs niñxs son parte de las estructuras y sistemas sociales; que no son sujetxs pre-sociales, sino personas con agencia y voz. Lxs niñxs, al igual que lxs adultxs, son agentes sociales que participan, configuran y reflexionan sobre las religiones, y sus experiencias religiosas. Invisibilizar y/o minimizar la importancia de las reflexiones de las niñas y los niños es un error que limita la comprensión de diversos fenómenos religiosos en las ciencias sociales.


[1] Pavez-Soto, Iskra y Natalia Sepúlveda Kattan. “Concepto de agencia en los estudios de infancia. Una revisión teórica”. Sociedad e Infancias 3 (22 de agosto de 2019): 193–210. https://doi.org/10.5209/soci.63243.

[2] Alanen, L. “Gender and generation: feminism and the child question”. 1994. Citado en Pavez-Soto, Iskra y Natalia Sepúlveda Kattan. “Concepto de agencia en los estudios de infancia. Una revisión teórica”. Sociedad e Infancias 3 (22 de agosto de 2019): 200.

[3] ibid.: 208.

[4] Rodríguez Pascual I. “La nueva sociología de la infancia: ¿un nuevo código de saberes para un nuevo estatus del niño?” en Para una sociología de la infancia: aspectos teóricos y metodológicos. Centro de Investigaciones Sociológicas, Colección MONOGRAFÍAS, Nº. 245. (2007): 54.

[5] Linder E. (2004). “Children as Theologians”. Citado en García Palacios et. al. Educación, niñez y religión. Una revisión en busca de coordenadas para su estudio. Religiao e Sociedade, Rio de Janeiro, N.º 38. (2018): 182.

[6] García Palacios et. al. Educación, niñez y religión. Una revisión en busca de coordenadas para su estudio. Religiao e Sociedade, Rio de Janeiro, N.º 38. (2018): 181-195.

[7] Ibid: 182.

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